lunes, 22 de junio de 2009

Te encontré

La primera mitad de la semana pasada fue realmente estresante. Sucede que el pasado sábado (13) no salí de rumba, así que el domingo siguiente estaba de pie a las 07:00 a. m. leyendo los anuncios clasificados de El Comercio muy segura yo de encontrar por fin el departamento de mis sueños o alguno que al menos cubra mis expectativas.

Ya con cinco departamentos candidateando por ser mi próxima morada y con las entrevistas con los prospectos de caseros pre acordadas, salí de la casa de mis padres aproximadamente a las 09:00 a. m. acompañada de mi papito. Empezaríamos desde la más alejada a San Diego (no apropósito, sino por un tema de cercanía al Estudio de Abogados en donde trabajo) y terminaríamos en Lince.

Después de perdernos por Surquillo (límite con San Borja) llegamos a una calle bonita, con casas de familia (no edificios)… me gustó la zona y más aún la casa donde aún se lucía el cartel de “se alquila minidepartamento”. Mi papi estacionó el auto casi chocando a uno plateado que se encontraba estacionado justo al frente de la casa… cuando me disponía a tocar el timbre salieron dos señoras super sonrientes dándose de besos y una de ellas repitiendo sin cesar: “que alegría, le prometo que cuidaré su casa como si fuera mía”… fue cuando tomé conciencia de haber llegado tarde.

Continuamos por Surquillo y ubicamos dos departamentos, pero no bajé del auto de papi pues ambos barrios no eran de mi agrado… conduje (ahora yo) hasta San Borja, exactamente la cuadra 6 de Bethoven, a dos cuadras de la casa de mis jefes… la casa bonita, el minidepartamento bonito, amoblado, nuevo… el gran problema era que la casera se veía muy mi madre y eso traería problemas (“solo entras hasta las 10:00 p. m.”, “no hay visitas masculinas en casa cuando yo no estoy”, “la música bajita por favor”… Así que descartado.

Quedaban dos departamentos en Lince: en el primero nunca me abrieron la puerta y el segundo era… era… para describirlo en dos palabras: SUMAMENTE HORRENDO.

Regresé a casa super cansada, con la voz de mi padre repitiéndome que no hay necesidad de vivir sola, que no se levantar ni un plato ni tender mi cama ni hacer ni un carajo de los quehaceres del hogar, que podría ahorrar y comprarme un auto o en un tiempo pagarme la inicial de mi propio departamento… mi cabeza daba mil vueltas y mis ánimos estaban en el piso.

El lunes y martes fueron fatales, el exceso de trabajo y el tráfico hicieron que mi capacidad de soportar estrés se vea afectada, estuve deambulando por el Parke Kennedy (http://mamipapi-mevoydelacasa.blogspot.com/2009/06/mi-soledad-y-yo-d.html) y me acordé de la amiga de Jenn que deseaba compartir su departamento, con la que nunca pude reunirme por actividades extra laborales sumamente placenteras… así que me comuniqué con Jenn y concretó una reunión con Funny para el miércoles 17 (uno de mis números favoritos) en la noche.

Llegó el día. Jenn y yo bajamos del taxi, el edificio queda ubicado en Alberto del Campo, al frente de Pharmax, zona muy bonita… el edificio es moderno y el departamento está pasando el octavo piso (no me di cuenta donde fue que paró el ascensor, solamente recuerdo que pasamos el octavo piso)…

No hay comentarios:

Publicar un comentario